He estado mirando el álbum familiar recientemente. Albergaba la esperanza de una interesante genealogía con aristocracia, una entrada de éxito empresarial, una historia de amor apasionante, algún familiar recóndito por el mundo en mi árbol genealógico… Pero nada se acercó a mis expectativas. Encontré sin embargo a mujeres recias, que sin ser bonitas, tenían mucho estilo y posaban felices con su aparencia. Algunas muy cercanas a mí, algunas que hasta ahora no sabia existían, me enamoré al instante de todas ellas, de sus historias y del tono sepia, las arrugas y los garabatos de estas fotos:





PS: I dedicate this post to my nana Demetria, featured in this pic (far right in black). She’ll be 100 this year/ PD: Dedico este post a mi abuelita Demetria, quien aparece en esta foto (de negro, última a la derecha). Cumplirá los 100 este año.